sábado, 20 de diciembre de 2008

LA LEYENDA DE MAHOMAD
escrita en verso en 1900
por Francisco Valverde y Perales


Francisco Valverde Perales nació en la villa de Baena (Córdoba) el 1 de Octubre de 1848, en el seno de una familia humilde y, como casi todos los grandes hombres de su época, tuvo unos principios duros por el estado político de la España de entonces.

Cursó estudios primarios en Baena y, ya adolescente, marcharía a Córdoba, Sevilla y Cádiz, en donde decidió ingresar con veinte años como voluntario en el Ejército, sentando plaza en Cantabria, entrando en campaña en la batalla de Alcolea, siendo en 1870 fue destinado como Guardia Civil a Cuba, en donde se dice que “defendió heroicamente la enseña española, siendo
condecorado con la Medalla del Mérito Militar”.

Después de varias campañas fue nombrado para la Comandancia de la Guardia Civil de Toledo, en donde se despertaría en él su curiosidad por la Historia, se retiró, con el grado de Comandante, en 1902.

Actual escudo de la villa de Baena

Se retiró a Baena y desarrolló sus aficiones de historiador, arqueólogo y poeta y dadas sus dotes de historiador, investigador y poeta ingresó en la Real Academia de la Historia y perteneció a la Academia de la Historia de San Fernando y sería correspondiente de la Real Academia de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes de Córdoba.

Posteriormente, le serían concedidos diversos galardones:

Cruz y Placa de San Hermenegildo.
Cruz de Isabel la Católica.
Medalla de Campaña con 8 pasadores.
Premio de la Real Academia al Talento.


Fue nombrado en su villa natal Hijo Ilustre con otorgación de la Medalla de Oro de la Villa de Baena y falleció en 1913.

Fue autor de una generosa bibliografía histórica:


Historia de la villa de Baena.
Batalla de Munda (monografía)
Antiguas ordenanzas de la villa de Baena.
Alelí (obra de teatro)
Soltera (obra de teatro)
Heridas de honra (obra de teatro)
Heridas de honra (Obra de teatro)
Antigüedades y vestigios de Baena.
Antigüedades romanas de Andalucía.

Escribió diversos artículos para las publicaciones científicas de su época, y redactó un curioso libro publicado en 1900 y titulado "Leyendas y Tradiciones de Toledo, Córdoba y Granada", escritas en verso e impreso en Gráficas Cañete, Baena (Córdoba) en 1970, con prólogo de Jose María Pemán y una carta de D. Juan Valera al autor, libro dedicado al Excmo. Sr. Marqués de Guadalerzas, con esta dedicatoria:


A Vd., mi respetable y cariñoso amigo, que tanto ha
contribuido con sus sabios consejos y enseñanzas
ilustrar mi pobre inteligencia, dedico esta
modesta obrita, que si no es acreedora a tal
distinción por su escaso mérito literario
tiene en su favor la benevolencia
de Vd., y la admiración, cariño
y agradecimiento que por Vd.
siente su autor.

Francisco Valverde.

Este libro de leyendas y tradiciones recoge un suceso ocurrido en el año 1300 y que Esteban de Caribay narra en la “Crónica General de España”:

“Durante las guerras de esto años, el rey Mahomad cercó Alcaudete, villa de la Orden de Calatrava, cuyos Caballeros y gentes que dentro se hallaban, no siendo partes para defender, la tomó dentro de pocos días, y con esta victoria, cercando a Baena, donde estaban Alonso Pérez de Saavedra, que tenía el alcázar, y Fernando Alonso de Córdova, hijo de Don Alonso Fernández y Payo Arias, y Juan Martínez de Argote y otros caballeros cordobeses, entró en el pueblo hasta ganar la mitad, de donde estos Caballeros, que de los vecinos del pueblo fueron valientemente ayudados, echaron a los moros, por lo cual el Rey Mahomad dio vuelta a Granada…”


MAHOMAD

I

Apenas las altas torres
de la morisca Granada
coloran sus capiteles
con los reflejos del alba,
cuando el Rey Mahomad II,
que en un overo cabalga,
a largo trote atraviesa
la plaza de Bibarrambla,
de cien alcaldes seguido
que cien pendones levantan
a cuya sombra congregan
diez mil valerosas lanzas.

No de fiestas y torneos
visten artísticas galas
no bonetes que coronen
plumas azules y blancas;
que entre bélicos arreos
bruñidos de cascos irradian,
pesados alfanjes ciñen,
fuertes escudos embrazan
y el pecho llevan cubierto
con finas cotas de malla.

Castilla de despedaza
y apenas si la prudencia
de su buena madre basta
a librar al joven Rey
de traidoras acechanzas;
mientras los bravos caudillos
de las fronterizos plazas
sin socorros y sin gente
huérfanos de su Monarca,
habrán de rendir al peso
de las sarracenas armas
con sus espadas invictas
las fuertes villas que guardan,
dando la vida con ellas
en servicio de la Patria.

¡Allá van! Cual torbellino
los campos queman y talan
de la villa de Alcaudete
cuyas sonoras campanas
tocando al arma coronan
de guerreros las murallas.

Mahomad sus gentes ordena
y el asalto se prepara,
mientras los fuertes cristianos
sobre la cruz de su espada
juran vencer en la lucha
o morir en la demanda.

Nubes de aceradas flechas
cruzan el aire contrarias
y con sorna gritería
por todas partes avanzan
hordas de moros que aplican
a los moros las escalas.

Los valientes caballeros
de la cruz de Calatrava
uno contra diez combaten
con indómita pujanza;
pero se esfuerzan en vano,
que la fortuna voltaría
a los árabes da el rostro
y a los cristianos la espalda.

Ya ganaron las almenas,
ya las duras cimitarras,
de los vencidos que huyen
en roja sangre se bañan.
Entran a saco la villa
y tras horrible matanza
los hombres llevan cautivos
y las mujeres esclavas.

De la torre del castillo
la enseña de la Cruz baja
y sube a ocupar su puesto
la media luna africana.
Cambió de señor la villa;
llegó la noche callada,
y a los horrores del día
sucedió, triste, la calma.

II

Aun no mostraba en Oriente
el sol sus doradas hebras
cuando el poder de un alcalde
el pueblo ganado deja
Mahomad y toma el camino
De la villa de Baena.

Tras breve marcha descubre
la cristiana fortaleza
que como nido de halcones
en la Almedina se asienta,
donde ve lucir señales
que llaman a la defensa.

El atrevido africano
con grave pompa despliega
por la llanura vecina
sus victoriosas enseñas
con belicoso aparato
de cajas y de trompetas.

Los baenenses no desmayan,
y con las gentes de guerra
que desde el castillo envía
el buen Alonso Saavedra,
los vecinos animosos,
aparecen con presteza
del Albayzín en el muro
del arrabal en la puerta,
donde con heróico esfuerzo
vencer o morir esperan.

Feroz es la arremetida
de las tropas agarenas,
sangrienta y breve la lucha,
inútil la resistencia.
La puerta salta en astillas
y en la confusión horrenda
vacilan los defensores
que hasta el Coso se repliegan.

¡Victoria! Gritan los moros
y en el arrabal penetran:
Mahomad ya dueño se juzga
de la codiciada presa
y al Alcázar se dirige,
cuando la hueste rehecha
de los valientes cristianos
con acometida recia,
a la voz de Payo Arias,
de Córdova y de Saavedra
y de Martínez argote
que marchan a la cabeza,
a cuchilladas abate
la media luna soberbia
que humillada y perseguida
deja la villa que incendia.

Tomó Mahomad de Granada,
escarmentado la vuelta;
dos años después moría
y hasta que bajó a la huesa
no se borró en su memoria
el recuerdo de Baena.

A su labor como arqueólogo se debe el hallazgo del Crismón de Baena que, por su singularidad, es atribuido al arte visigodo por unos autores, y considerado por el que fue cronista de Baena, Juan Antonio Bailén, como uno de los últimos eslabones de la cultura romanticista.

El Crismón es una pieza de metal con un anagrama con el nombre de Cristo, de apenas unos 34x25cm.

Según Juan Antonio Bailén "Es una pieza de indudable valor histórico por su representatividad litúrgica y mística”.

Fue hallado en la Villa de Íscar (entre Castro del Río y Baena), donde en el siglo XVII parece ser, según cuenta Valverde y Perales, existía en ese lugar un pequeño poblado con el nombre local de "la aldea". Decía el historiador Francisco Valverde y Perales, que este Crismón de Baena se encontró por unos trabajadores dentro de una tumba de un clérigo del S. VI en el núcleo de Izcár, dentro del término de Baena.

La desaparición del Crismon de Baena fue advertida por D. Juan Torrico Lomeña, en el transcurso de en una visita rutinaria al Museo Arqueológico Nacional, comprobó que faltaba. Desapareció hace 15 años del Museo Arqueológico Nacional, donde se encontraba donado por Francisco Valverde y Perales y donde estaba expuesto.

El diario ABC de Madrid reseñaba el día 9 de julio de 1993:

"Una cruz visigoda, importantísima desde el punto de vista arqueológico, fue robada el pasado día 6 de Julio del Museo Arqueológico Nacional, según reveló el Ministerio de Cultura..."

El diario El País también publicaba el 9 de Julio de 1993:

"El Crismón de Baena, una cruz visigoda de una gran importancia arqueológica, expuesta en el Museo Arqueológico Nacional desde su donación por la villa de Baena, por mediación del arqueólogo e historiador local Francisco Valverde, ha desaparecido de la sala donde figuraba el pasado día 6 de Julio, según ha confirmado a EFE el Ministerio de Cultura..."

Bruno Alcaraz Masáts

viernes, 19 de diciembre de 2008

El Cuarto o Patio de los Leones,
residencia real nazarí de la Alhambra

El viajero romántico Alejandro Dumas, cuando llegó a Granada, comparó el Patio de los Leones a "Un sueño petrificado por la varilla de un brujo", mientras que el escritor Pio Baroja dió, años después, una descripción menos poética: "Parece un quiosco de refrescos".

Foto de Cliford, tomada en el año 1862

El Cuarto o Patio de los Leones representa el conjunto más elegante de la arquitectura de los nazaríes del Reino de Granada, en él el arte arábigo-granadino alcanza su máximo esplendor y comenzó a construirse a partir de 1.377, por orden del rey nazarí Muhammad V.

El Patio de los Leones encierra en si mismo la descripción coránica del Paraiso. Tiene una fuente en el centro y a ella, a través de 4 canales que semejan los 4 ríos del Paraiso, llegan las aguas de las otras seis fuentes que existen alrededor de ella.

Ese agua que surge en el centro mismo del patio tiene la misión de evocar una fuente mucho mas importante. La que, según nos dice el Corán, está en el centro del Paraíso. O la que menciona el libro del Génesis, en la Biblia... El río que salía del Edén se dividía en cuatro brazos: Pishon, Ghion, Tigris y Eúfrates. Es el texto común de las tres religiones: hebrea, cristiana y musulmana.

Dibujo de Prieto Moreno, el arquitecto conservador de la Alhambra
en el periodo de 1942-1970, que relaciona la idea del oasis
en el patio de los Leones

Posee 124 columnas de mármol blanco de Macael (Almería), que semejan un bosque de palmeras o un oasis a modo de toobas, los árboles maravillosos del Edén, y contiene 11 tipos de arcos diferentes, así como columnas exentas, dobles o formando en los ángulos grupos de tres o cuatro en sus dos templetes, con capiteles cúbicos y grandes ábacos. Esta disposición claustral es una rareza en el arte musulmán de al-Ándalus, aunque sus precendentes se hallarían en los patios de las mezquitas y en los claustros cristianos del Cister en España, que poseen templetes que encierran la fuente del claustro.

Los dos centros de los lados mayores, que están orientados al Norte (Sala de Dos Hermanas) y al Sur (Sala de los Abencerrajes) tienen un arco de medio punto y son mayores que el resto. Sobre ellos, se distinguen los aposentos de las mujeres del Rey.

Esquemas del Jardín del Paraiso, que figura
en el manuscrito hindú "Guia de la Meca y el Más Allá"
y de la planta del patio de los Leones.
Moynihan - Siglo XVII

Los doce leones en círculo forman una rueda que soporta la taza y pertenecen al siglo XI, está soportada por 12 leones de apariencia entre mesopotámica y oriental. Dos de estos leones portan un triángulo en su frente, uno con el ápice hacia arriba y el otro, el contrario, con el ápice hacia abajo. Indican el Norte (Sala de Dos Hermanas) y el Sur (Sala de los Abencerrajes) y los dos triángulos, unidos en el espacio, formarían el Sello de Salomón, de ahí la sospecha de que la fuente, de una antigüedad superior a la Alhambra, era propiedad del judío Ibn Nagrela, visir del rey de Granada Ibn al-Ahmar y vivió en un suntuoso palacio en cuyo centro había una maravillosa fuente con doce leones.

León de la Alhambra, con un triángulo en su frente.

La futura fuente del palacio de la Alhambra estaba ya descrita, casi doscientos años antes, en un poema de Ibn Gabirol, cuando describe la fuente que existía en la casa de Ibn Nagrela:

Hay un copioso estanque que semeja
al mar de Salomón,

pero que no descansa sobre toros;
tal es el ademán de los leones,
que están sobre el brocal, cual si estuvieran
rugiendo los cachorros por la presa;
y como manantiales derraman sus entrañas
vertiendo por sus bocas caudales como ríos.
Y junto a los canales, hincadas, corzas huecas
para que el agua sea trasvasada
y rociar con ella en los parterres
las plantas y asperjar los juncos de aguas puras
y el huerto de los mirtos con ellas abrevarlo;
y siendo como nubes, salpican un ramaje
fragante, con aromas de esencias, cual si fuera
de mirras incensado.

Los 12 leones, que están en actitud de respeto, tienen dos peculiaridades distintivas:

1 - Cada león tiene recogida la cola por detrás, girando hacia la izquierda, por debajo del vientre, hasta alcanzar el costado izquierdo.

2 - Cada cabeza de león está terminada con un peinado con dibujos y trazas distintos a los otros leones.

El viajero veneziano Andrea Navagiero describió, en una carta fechada en el último día de Mayo de 1526, cómo los leones no vertían agua si se murmuraba una palabra en la boca de uno de ellos, aunque fuese un leve susurro y si otra persona, a su vez, se situaba en la boca de cualquiera otro león, si ponía el oido resonaba la voz clara y profunda.

Mármol describió la fuente indicando que contenía en su interior un mecanismo perfecto de reloj o astrolabio de agua, donde cada hora o ciclo cósmico vendría señalado por el chorro de agua de su león correspondiente. Era el autómata de la Alhambra.

La fuente central tiene 12 leones que manan agua por su boca. En el borde de la taza hay inscrito un poema en árabe. Se cuenta o se cree que esta fuente pertenecía al palacio que poseía un judío -Ibn Nagrela- en algún lugar de la Alcazaba. La taza tiene una inscripción compuesta por Ibn Zamrak y que dice:

"Bendito sea aquel que otorgó al imán Muhammad bellas ideas para engalanar sus mansiones"

En los bordes de la taza central figura el poema de Ibn Zamrak, una casida dedicada a rey Muhammad V.

Poema de la taza de los leones

Bendito sea Aquél que otorgó al iman Mohamed
las bellas ideas para engalanar sus mansiones.
Pues, ¿acaso no hay en este jardín maravillas
que Dios ha hecho incomparables en su hermosura,
y una escultura de perlas de transparente claridad,
cuyos bordes se decoran con orla de aljófar?
Plata fundida corre entre las perlas,
a las que semeja belleza alba y pura.
En apariencia, agua y mármol parecen confundirse,
sin que sepamos cuál de ambos se desliza.

¿No ves cómo el agua se derrama en la taza,
pero sus caños la esconden enseguida?
Es un amante cuyos párpados rebosan de lágrimas,
lágrimas que esconde por miedo a un delator.
¿No es, en realidad, cual blanca nube
que vierte en los leones sus acequias
y parece la mano del califa, que, de mañana,
prodiga a los leones de la guerra sus favores?

Quien contempla los leones en actitud amenazante,
sabe que sólo el respeto al Emir contiene su enojo.
¡Oh descendiente de los Ansares, y no por línea indirecta,
herencia de nobleza, que a los fatuos desestima:
Que la paz de Dios sea contigo y pervivas incólume
renovando tus festines y afligiendo a tus enemigos!»


Los 4 espacios que se generan por el cruce de los 4 canales de agua de los surtidores poseían un jardín bajo nivel y las galerías estuvieron siempre soladas de mármol blanco de Macael. En 1585 se soló todo el patio, suprimiendo estos jardines, conservando sólo los canales de agua de los surtidores, pero en 1808 se recuperaron de nuevo las zonas ajardinadas, aunque 1846 se hicieron desaparecer definitivamente para evitar las humedades que producían.

De sus cuatro laterales sobresalen cuatro salas. De dos de ellas sobresalen dos templetes para preservar del sol del verano a los habitantes de este palacio. Se cree que la sala de los Mocárabes y la de los Reyes servían para hacer fiestas diurnas, mientras que las de Dos Hermanas y Abencerrajes servían para fiestas nocturnas, la primera se usaría en verano y la segunda en invierno.

La fuente es un símbolo judío que representa a los doce toros que sostenían la fuente que Salomón construyó en su palacio o templo de Jerusalem. También los leones pueden representar a las doce tribus de Israel sosteniendo el Mar de Judea, aunque otros autores indican que representan también a los 12 signos del Zodiaco.

Este patio rectangular, que está formado por la unión de dos cuadrados perfectos, encierra una medida antigua usada por los agrimensores medievales: El Marjal.

El término Marjal es una medida agraria que se utilizaba para las tierras de riego desde el período de la Granada nazarí (1238-1492); conservándose actualmente en regiones y comarcas del Mediterráneo, procede del árabe hispánico Márga y se correspondía con 5 áreas y 25 centiáreas. Posteriormente esta medida eran algo más de 100 estadales (111’8) y con la llegada del Sistema Métrico Decimal se correspondía, en Granada, con 528’42 metros cuadrados.

El Marjal se usaba, según el Catastro del Marqués de la Ensenada, en 66 pueblos de Granada, tanto en el sur como en la Vega de Granada y tenía 4 tipos distintos de medida en Granada:

El marjal presenta distinto valor en su superficie, según sostiene el profesor de la UGR don Manuel Espinal. En el partido de Ugíjar, en La Alpujarra, se conoce como marjal de riego o ferrado y equivale a 625 varas cuadradas castellanas, 5.625 pies cuadrados, 39,06 estadales de marco real. Es un cuadrado que tiene de lado 25 varas ó 436 m2 en la superficie, mientras que en las tierras y partidos de Granada y Santa Fe es de 528 m2 y en Motril y las tierras de Órgiva alcanza 500 m2 y en otras tierras de Granada se constata una superficie de 527 m2.

Fotografía del Patio de los Leones del Catálogo de Alfonso XIII

150 años después, Felipe IV concedió a su sobrino Alfonso de Alencastre o de Láncaster el título de Duque de Abrantes en 1642 y en el siglo XVII, el Duque de Abrantes fue el propietario de las tierras del pago de Pinos Puente, y en Cijuela y en las alquerias de la Vega de Granada vivían sus aparceros, fue quien estableció la medida de superficie más común entre los agricultores de la Vega como norma definitiva: el Marjal, que son 528'42 m2, exactamente lo que mide el Patio de los Leones.

El marjal de Granada equivale a 528'42 metros cuadrados y es igual a la superficie del patio de los Leones, que por ello es llamado poéticamente “el patio del marjal”.

Bruno Alcaraz Masáts

sábado, 6 de diciembre de 2008

Averroes
Abu-l-Walid Muhammad Ibn Rusd "al hafid"
ابو الوليد محمد ابن احمد ابن محمد ابن رشد
9 de Safar del Año de la Hégira 595
- 10 de Diciembre de 1198 -

(En el 800 Aniversario de su Muerte en Marrakech)
(Córdoba, 1126 - Marrakech, 1198)

"Cuatro cosas no pueden ser escondidas durante largo tiempo:
la ciencia, la estupidez, la riqueza y la pobreza"
Averroes

Filósofo y pensador de al-Ándalus, conocido como Ibn Rusd o Averroes, nació en una época de controversias dogmáticas y filosóficas, en el seno de una familia de abogados, jurisconsultos y tanto él como su padre y su abuelo, fueron Cadíes de Córdoba y Sevilla. De la familia de los Banu Rusd se tiene conocimientos correspondientes a 6 generaciones.


El abuelo de Averroes, llamado Abu-l-Walid Muhammad ben Ahmad Ibn Muhammad, "el Abuelo, para distinguirlo de su famoso nieto, fue un excepcional jurista, Cadí mayor (qadí al-gama) de Córdoba, fue un excepcional consejero de los principes almorávides y almohades. Gracias a sus consejos, los mozárabes que ayudaron a la Aceifa cristiana del rey cristiano Alfonso VII, en lugar de ser ejecutados, que era lo usual en ese tiempo, fueron desterrados.

El padre de Averroes se llamó Abu-l-Qasim Ahmad Ibn Rusd, y también jurista y Cadí mayor de Córdoba, intervino en la reforma de la enseñanza ordenada por los almohades.

Su hijo, Abu-l-Walid Muhammad Ibn Rusd "al-hafid", el "Nieto", para distinguirlo del abuelo, nació en Córdoba en 1126, y con el tiempo llegaría a ser el más grande de los pensadores del Islam y el más universal de los nacidos en la península ibérica, junto con Lucio Anneo Séneca, escritor, filósofo y político romano, nacido también en Cordoba, en el año 3 a.C. y que falleció en Roma, en el 65 d.C. al ser descubierta una conjura contra Nerón, siendo condenado a quitarse la vida, lo que hizo cortándose las venas.

Desde muy joven estudió humanidades árabes y derecho islámico, aunque estudió con interés la medicina, la filosofía y las matemáticas. Fue tan trabajador que, al decir de sus biógrafos, sólo descansó dos veces en su vida: el día de la muerte de su padre y el día de su boda.

La Igaza o licentia docenti, equivalente a nuestro título de profesor, pudo recibirla entre 1141 1146 y debió casarse entre 1146 y 1153. Tuvo más de 5 hijos. De dos de ellos conocemos sus nombres: Abu -l-Muhammad 'Abd Allah Inb Rusd, que fue médico, filósofo y Cadí y Abu-l-Qasim Muhammad Ibn Rusd, que también ocupó el puesto de Cadí. De los otros hijos ignoramos sus nombres, pero sabemos que ocuparon el puesto de Cadí en ciudades de al-Ándalus. De sus nietos sólo tenemos noticias de uno de ellos, Abu-l-Abbas Yahya Ben Qasim Ibn Rusd, que también fue juez.

Manuscrito de Averroes sobre medicina

Abentofáil introdujo a Averroes en la corte almohade de Abu Ya'qub Yusuf, sultán de Marruecos en la ciudad de Marrakech (nombre de la capital y de donde derivaría el actual nombre de Marruecos), en donde sustituyó a Alpetragio, y recibió numerosos encargos políticos que le obligaron a viajar por al-Ándalus y Marruecos, así como el encargo de comentar las obras de Aristóteles. Al año siguiente, como recompensa, recibió en título de Cadí de Sevilla.

A su gran humanidad se unía un gran cariño por su Córdoba natal, a la que consideraba la tierra más hermosa, y a sus paisanos, a los que tenía como los más inteligentes de su época. En cambio, sus escritos son especialmente duros con los tiranos de todos los tiempos y muy especialmente con el suyo:

"No hay peor condición que la de tirano"

El sucesor de Yusuf, Ya'qub al-Mansur, también lo protegió, pero aunque era musulmán de fe ardiente, con sus ideas sobre la filosofía y la religión, se hizo sospechoso de herejía y dieron pie a sus enemigos para enemistarle con el nuevo sultán, el cual lo desterró de su corte acusado, como otros sabios hispano-musulmanes de la época de promover la filosofía y la ciencia griegas, con menoscabo de la religión islámica. El sultan al-Mansur le desterró a Elisana (actual Lucena) cerca de Córdoba, de donde se le prohibió salir y condenó su obra, siendo destruidos sus libros por orden expresa de al-Mansur, y que en el Occidente latino sólo conocería después a través de las versiones y traducciones hebreas.

Entonces Averroes hubo de sufrir los insultos de los fanáticos. Él mismo cuenta que una vez fue con sus hijos a la mezquita para asistir a la oración de la tarde de un Viernes y el populacho lo expulsó de ella. Veinte meses más tarde, en 1198, el sultán perdonó a Averroes y lo llevó consigo a Marrakech y ya no volvió a pisar en vida suelo de al-Ándalus.

El jueves, 9 de Safar del año de la Hégira 595, (10 de Diciembre de 1198) y a la edad de setenta y dos años, falleció Averroes en dicha ciudad marroquí. Su cadáver fue trasladado tres meses después a Córdoba y sepultado en el cementerio de los Bannu´Abbad.

El entierro debió ser famoso, pues el místico Ibn Arabí de Murcia dice que lo presenció y que la acémila que trasportaba sus restos llevaba en un lado sus restos y en el otro, como contrapeso, sus libros. Gracias a un texto del Kitab al-Kulliyat se puede saber que que murió a consecuencia de las secuelas de una artritis que padecía desde joven, debida a un brote de fiebres reumáticas que no le curaron bien cuando era niño.

Como filósofo, constituye un eslabón fundamental entre la filosofía griega y la escolástica; recogió las teorías de Avicena, Aben Masarra y Avicebrón de Málaga, y ha pasado a la historia como el introductor de Aristóteles en la Europa del siglo XIII. Los escolásticos cristianos entendieron que Averroes había escrito tres comentarios a Aristóteles (en realidad, son tres exposiciones de la filosofía) y le llamaron "El Comentador".

Como médico, fue discípulo Avenzoar y Abentofáil, y dejó escritas unas 16 obras de medicina, que constituyeron un compendio muy completo de los conocimientos hispano-musulmanes de Anatomía, Fisiología, Patología, Diagnosis y Materia Médica. La más famosa, el Kitab al-Kulliyat, compendio de medicina general, era muy traducido en los siglos posteriores y publicada junto al Kitab al-Teisir, de Avenzoar. Averroes estudió a menudo las opiniones de este último y las del médico oriental al-Razes, comparándolas con las de Galeno e Hipócrates, y se extendió en largas disgreciones filosóficas.

Como astrónomo, fue uno de los que discutió las doctrinas de Ptolomeo, señalando los errores del astrónomo alejandrino y estudió las teorías de Azarquiel de Toledo.

Entre sus obras, destaca "Comentarios" a Aristóteles, que se divide en Grandes Comentarios, Comentarios Medios y Paráfrasis o Análisis. Por las referencias citadas en sus obras, se supone que que compuso antes los Comentarios Medios que los Grandes, y las Paráfrasis casi al mismo tiempo que los Comentarios Medios.

Además de estos Comentarios, escribió:

- La destrucción de "la destrucción de los filósofos" de al-Gazel, como refutación de la obra de al-Gazel.

- "Cuestiones" o disertaciones sobre varios pasajes del Organon de Aristóteles.

- "Disertaciones físicas", o pequeños tratados sobre cuestiones de la física del Estaragita.

- Dos disertaciones sobre la unión del intelecto separado del hombre.

- Un estudio sobre el problema de "Si es posible que el intelecto (el material o hílico) comprenda las formas separadas o abstractas".

- Una refutación del tratado "Sobre la división de los seres", de Avicena.

- Un tratado acerca del acuerdo entre la religión y la filosofía.

- Un estudio sobre el verdadero significado de los dogmas de la religión, escrito en Sevilla en 1179.

Se inclinaba en sus doctrinas filosóficas hacia el materialismo y el panteismo y fueron éstas condenadas por el Vaticano y por la Universidad de París, que en el siglo XVII editó el libro "los enemigos de Dios", que condenaba a Averroes y a su filosofía y en sus páginas recogía un dibujo grotesco de Averroes.

Bruno Alcaraz Masáts - 1998

Texto para la IV Expedición Cultural Granada - Marrakech,
organizada por la Asociación Cultural Medina Andalusí, en colaboración con la Diputación de Granada y la Delegación
de Cultura de la Junta de Andalucía.
27 Di
ciembre 1998 / 4 Enero 1999


viernes, 28 de noviembre de 2008

El Decreto de la Alhambra o Edicto de Granada de 1492:
La Expulsión de los Judíos de la Península Ibérica


El Decreto de la Alhambra o Edicto de Granada fue un decreto promulgado en la Alhambra el 31 de marzo de 1492 por los reyes recién llamados Reyes Católicos, Fernando II de Aragón e Isabel I de Castilla, mediante el cual se expulsaba a los judíos de la península Ibérica con término el 31 de julio de 1492, aunque por diversos motivos logísticos, se prorrogó este plazo hasta el 2 de agosto a las doce de la noche.

El día 2 de agosto de 1492, a las 12 de la noche, coincidió con la partida de Cristóbal Colón hacia el descubrimiento de una nueva ruta a las Indias, viaje que acabó con el descubrimiento de América. Esta coincidencia a dado pie a la teoría del origen judío de Colón expuesta, entre otros, por Simón Wiesenthal en su libro Operación Nuevo Mundo, la misión secreta de Cristóbal Colón. Se dice que en ese primer viaje de Colón le acompañaban tripulantes 6 judíos.

El rey Fernando II de Aragón, el Católico, promulgaría y firmaría otro decreto para el reino de Aragón. Ambos decretos o edictos reales partían de un mismo borrador elaborado por Tomás de Torquemada, el inquisidor general en España, al que el cronista Sebastián de Olmedo, llamó «el martillo de los herejes, la luz de España, el salvador de su país, el honor de su orden». El nombre de Torquemada, como parte de la leyenda negra de la Inquisición española, se ha convertido en un apodo para la crueldad y el fanatismo al servicio de la religión.

La base de los argumentos oficiales esgrimidos fueron redactados por Tomas de Torquemada y se fundamentaba en 3 principios básicos:

1 - Combatir de forma definitiva la herética influencia que los judíos extendían por las Coronas de Aragón y Castilla.

2 - Erradicar el daño que los judíos ejercían sobre la comunidad cristiana al intentar sustraer la santa fe católica de los fieles cristianos y pervertir su creencia y opinión.

3 - El edicto se apoyaba además en otras medidas de expulsión y segregación tomadas con anterioridad en la península para defender la colectividad y cohesión del reino.

La expulsión y sus condiciones

Tomas de Torquemada

Se ordenaba salir con carácter definitivo y sin excepción a todos los judíos, y no solo de los reinos peninsulares, sino de todos aquellos territorios que se encontraran bajo el poder de los Reyes Católicos.

El plazo era de 4 meses a partir de la firma de edicto, es decir, que el 31 de julio no debía quedar en el reino ni un solo judío. En un edicto posterior, Torquemada amplió el plazo 10 días, para compensar el tiempo que transcurrió entre la promulgación y el conocimiento del decreto.

La desobediencia a este edicto supondría la condena a muerte y la confiscación de los bienes.

Los Reyes ofrecieron su seguro real para que los judíos negociaran su fortuna y se la llevaran, si así era su deseo en forma de letras de cambio, puesto que había una ley que prohibía que se sacaran oro, plata, monedas, armas y caballos del país.
Aunque en el edicto no se hacía referencia a una posible conversión, esta alternativa estaba implícita, y muchos individuos pertenecientes a la élite hebrea se acogieron a la conversión para evitar ser expulsados, iniciándose la Segunda Diáspora, tras la Primera Diáspora judía que comenzó cuando los judíos fueron exiliados a Babilonia por Nabucodonosor en el 586 a.C. Según la tradición hebrea, los judíos que vivían fuera de Israel se consideraban a sí mismos exiliados (en hebreo, galut).

Los sefardíes actuales son los descendientes de los judíos que vivieron en la Península Ibérica hasta el 2 de Agosto de 1492.


Sefarad, la tierra occidental del mundo

Sefarad (del hebreo ספרדים 'españoles') es el nombre que los hebreos daban a Hispania y Sephardím era el término que ya usaban los judíos de Iberia, que recuerda a los habitantes de la ciudad bíblica de Sepharad, mencionada en las profecías de Obadiah, (Abdías) a la unos identifican como la ciudad de Sardis, la actual Sart, capital de Lidia, en Asia Menor y otros con una localidad de Mesopotamia, cerca de Babilonia. Sin embargo, la tradición judía tiende a ubicar Sefarad en la parte occidental del mundo conocido entonces, es decir, la península ibérica.

Si bien es cierto que convivieron en época medieval con los hispano-musulmanes y los cristianos, no lo hicieron de forma pacífica. Durante siglos y su cultura prosperó gracias a la política filo-judía de algunos monarcas anteriores a la intronización de los Trastámara.

Durante la Edad Media, los hebreos de Hispania fueron reconocidos como los líderes de la fe y cultura judías en aquellos siglos, ejercieron un liderazgo religioso y cultural, que se prolongó incluso durante varios siglos tras la expulsión.

Cuentan que a la promulgación del Edicto de expulsión de 1492 por los Reyes Católicos, conocido como el Decreto de la Alhambra o como el Edicto de Granada, los judíos españoles no reaccionaron de manera homogénea frente al terrible dilema que se les planteaba, por lo que el éxodo y las conversiones en masa fueron parte del caos y de la desestructuración social que generó el Edicto de Granada.

Quienes optaron por partir formaron parte de las largas filas humanas que avanzaron con lo poco que podían trasportar -no pudiendo llevarse oro ni plata, la huída desesperada generó improvisadas subastas a precios irrisorios- hacia el norte de África, el antiguo Imperio Otomano, Holanda (de donde muchas familias emigraron a las colonias de Curaçao, Surinam, y Aruba), Inglaterra, Alemania, Dinamarca, Austria, Suiza y Hungría, donde se establecieron en comunidades y conservaron su patrimonio cultural. Durante siglos conservaron una variedad de castellano llamada jaquetía o judeoespañol, que se desarrolló de forma aislada respecto al español de España y América.

En la lengua del Israel contemporáneo, la palabra "sefardí" incluye a las comunidades judías que inmigraron de los países del Medio Oriente, notablemente de Yemen, Iraq e Irán, aunque no tienen conexiones ancestrales con los judíos de España y Portugal. Judíos de estas comunidades medio-orientales son a veces llamados "judíos orientales" por el equivalente hebreo "mizrajim". Anteriormente fueron conocidos como "judíos árabes", pero lo inconveniente de esta expresión la hizo caer en desuso.

El término "Nusaj Sefarad" no se refiere a la liturgia que se recita por sefarditas generalmente, sino a una liturgia europea alternativa que es usada por muchos jasidistas. Tradicionalmente, los sefardíes utilizan la Nusaj Edot Hamizraj para orar (liturgia de las congregaciones de Oriente) que es conocido, como "Nusaj Sefaradi" también.

Grabado de músicos sefarditas

Texto del Decreto de Granada o Edicto de la Alhambra

Los Reyes Fernando e Isabel, por la gracia de Dios, Reyes de Castilla, León, Aragón y otros dominios de la Corona- al príncipe Juan, los Duques, Marqueses, Condes, ordenes religiosas y sus Maestres, señores de los Castillos, Caballeros y a todos los judíos hombres y mujeres de cualquier edad y a quienquiera esta carta le concierna, salud y gracia para él.
Bien es sabido que en nuestros dominios, existen algunos malos cristianos que han judaizado y han cometido apostasía contra la santa fe Católica, siendo causa la mayoría por las relaciones entre judíos y cristianos. Por lo tanto, en el año de 1480, ordenamos que los judíos fueran separados de las ciudades y provincias de nuestros dominios y que les fueran adjudicados sectores separados, esperando que con esta separación la situación existente sería remediada, y nosotros ordenamos que se estableciera la Inquisición en estos dominios; y en el término de 12 años ha funcionado y la Inquisición ha encontrado muchas personas culpables además, estamos informados por la Inquisición y otros el gran daño que persiste a los cristianos al relacionarse con los judíos, y a su vez estos judíos tratan de todas maneras a subvertir la Santa Fe Católica y están tratando de obstaculizar cristianos creyentes de acercarse a sus creencias.
Estos Judíos han instruido a esos cristianos en las ceremonias y creencias de sus leyes, circuncidando a sus hijos y dándoles libros para sus rezos, y declarando a ellos los días de ayuno, y reuniéndoles para enseñarles las historias de sus leyes, informándoles cuando son las festividades de Pascua y como seguirla, dándoles el pan sin levadura y las carnes preparadas ceremonialmente, y dando instrucción de las cosas que deben abstenerse con relación a alimentos y otras cosas requiriendo el seguimiento de las leyes de Moisés, haciéndoles saber a pleno conocimiento que no existe otra ley o verdad fuera de esta. Y así lo hace claro basados en sus confesiones de estos judíos lo mismo a los cuales han pervertido que ha sido resultado en un gran daño y detrimento a la santa fe Católica, y como nosotros conocíamos el verdadero remedio de estos daños y las dificultades yacían en el interferir de toda comunicación entre los mencionados Judíos y los Cristianos y enviándolos fuera de todos nuestros dominios, nosotros nos contentamos en ordenar si ya dichos Judíos de todas las ciudades y villas y lugares de Andalucía donde aparentemente ellos habían efectuado el mayor daño, y creyendo que esto seria suficiente de modo que en esos y otras ciudades y villas y lugares en nuestros reinos y nuestras posesiones seria efectivo y cesarían a cometer lo mencionado. Y porque hemos sido informados que nada de esto, ni es el caso ni las justicias hechas para algunos de los mencionados judíos encontrándolos muy culpables por lo por los susodichos crímenes y transgresiones contra la santa fe Católica han sido un remedio completo obviar y corregir estos delitos y ofensas. Y a la fe Cristiana y religión cada día parece que los Judíos incrementan en continuar su maldad y daño objetivo a donde residan y conversen; y porque no existe lugar donde ofender de mas a nuestra santa creencia, como a los cuales Dios ha protegido hasta el día de hoy y a aquellos que han sido influenciados, deber de la Santa Madre Iglesia reparar y reducir esta situación al estado anterior, debido a lo frágil del ser humano, pudiese ocurrir que podemos sucumbir a la diabólica tentación que continuamente combate contra nosotros, de modo que, si siendo la causa principal los llamados judíos si no son convertidos deberán ser expulsados del Reino.
Debido a que cuando un crimen detestable y poderoso es cometido por algunos miembros de algún grupo es razonable el grupo debe ser absuelto o aniquilado y los menores por los mayores serán castigados uno por el otro y aquellos que permiten a los buenos y honestos en las ciudades y en las villas y por su contacto puedan perjudicar a otros deberán ser expulsados del grupo de gentes y a pesar de menores razones serán perjudiciales a la República y los mas por la mayoría de sus crímenes seria peligroso y contagioso de modo que el Consejo de hombres eminentes y caballeros de nuestro reinado y de otras personas de conciencia y conocimiento de nuestro supremo concejo y después de muchísima deliberación se acordó en dictar que todos los Judíos y Judías deben abandonar nuestros reinados y que no sea permitido nunca regresar.
Nosotros ordenamos además en este edicto que los Judíos y Judías cualquiera edad que residan en nuestros dominios o territorios que partan con sus hijos e hijas, sirvientes y familiares pequeños o grandes de todas las edades al fin de Julio de este año y que no se atrevan a regresar a nuestras tierras y que no tomen un paso adelante a traspasar de la manera que si algún Judío que no acepte este edicto si acaso es encontrado en estos dominios o regresa será culpado a muerte y confiscación de sus bienes.
Y hemos ordenado que ninguna persona en nuestro reinado sin importar su estado social incluyendo nobles que escondan o guarden o defiendan a un Judío o Judía ya sea públicamente o secretamente desde fines de Julio y meses subsiguientes en sus hogares o en otro sitio en nuestra región con riesgos de perder como castigo todos sus feudos y fortificaciones, privilegios y bienes hereditarios.
Hágase que los Judíos puedan deshacerse de sus hogares y todas sus pertenencias en el plazo estipulado por lo tanto nosotros proveemos nuestro compromiso de la protección y la seguridad de modo que al final del mes de Julio ellos puedan vender e intercambiar sus propiedades y muebles y cualquier otro articulo y disponer de ellos libremente a su criterio que durante este plazo nadie debe hacerles ningún daño, herirlos o injusticias a estas personas o a sus bienes lo cual seria injustificado y el que transgrediese esto incurrirá en el castigo los que violen nuestra seguridad Real.
Damos y otorgamos permiso a los anteriormente referidos Judíos y Judías a llevar consigo fuera de nuestras regiones sus bienes y pertenencias por mar o por tierra exceptuando oro y plata, o moneda acuñada u otro articulo prohibido por las leyes del reinado.
De modo que ordenamos a todos los concejales, magistrados, caballeros, guardias, oficiales, buenos hombres de la ciudad de Burgos y otras ciudades y villas de nuestro reino y dominios, y a todos nuestros vasallos y personas, que respeten y obedezcan con esta carta y con todo lo que contiene en ella, y que den la clase de asistencia y ayuda necesaria para su ejecución, sujeta a castigo por nuestra gracia soberana y por la confiscación de todos los bienes y propiedades para nuestra casa real y que esta sea notificada a todos y que ninguno pretenda ignorarla, ordenamos que este edicto sea proclamado en todas las plazas y los sitios de reunión de todas las ciudades y en las ciudades principales y villas de las diócesis, y sea hecho por el heraldo en presencia del escribano público, y que ninguno o nadie haga lo contrario de lo que ha sido definido, sujeto al castigo de nuestra gracia soberana y la anulación de sus cargos y confiscación de sus bienes al que haga lo contrario.
Y ordenamos que se evidencie y pruebe a la corte con un testimonio firmado especificando la manera en que el edicto fue llevado a cabo.
Dado en esta ciudad de Granada el Treinta y uno día de marzo del año de nuestro señor Jesucristo de 1492.
Firmado Yo, el Rey, Yo la Reina, y Juan de Coloma, secretario del Rey y la Reina quien lo ha escrito por orden de sus Majestades.
Colaboración publicada en la Revista de Textos de Historia del Reino de Castilla la Vieja, editada en Salamanca 15 de Octubre de 2004 - nº 134

Bruno Alcaraz Masáts

jueves, 27 de noviembre de 2008

El Decreto de Granada, conocido
como el Edicto de la Alhambra,
sobre la Expulsión de los Judíos
en 1492 en Ladino

Transkripsyon del Dekreto de Ekspulsion ke fue anonsyado por
la Reyna Isabella i el rey Ferdinand de Espania en 1492,
ke ovligava a los judios de salir por entero de la Espania.

El Rey Fernando I la Reyna Isabelle, por grasya de Dios, Rey I Reyna de Kastilya, Leon, Aragon I otras dominiones de la korona - al Prinsipe Juan, a los dukados, markizes, kontes, sacerdotes de la santa relijyon, los responsables pasados, los komandantes, lordes de los kastigos, kavalyeros, I a todos los Djudios, ombres I mujeres te todas edades, I a todos los kualos ke son konsernados por esta letra- salud I grasya sovre vozotros.
Savesh muy bien ke en tierras de nuestro Reynado, egzisten algunos Kristyanos malos I falsos , ke se komportan komo Djudios I kometyeron el grande pekado de apostaziya enverso nuestra Santa kreyensia Katolika, la razon es por ke Djudios I Kristyanos estuvieron en kontakto en bivyendo uno al lado del otro.
Es por esta razon ke en el anyo 1480 ordenimos ke los Djudios seyan aleshados I separados de las sivdades I lugares de nuestro payis, I ke les seyga dado kuartieres separados, esperando ke esta separasyon iva topar remedyo a a la mala influensa. I de mas, ordenimos ke una Inkuizisyon seyga establesida en estos lugares, En los dodje anyos ke la Inkuizisyon estuvo funksionande topo a munchas personas kulpables de krimen enverso la kreensia I la Relijyon Kristyana.
Aparte de esto, la Inkizisyon I otros manaderos mos embezaron ke el grande danyo echo por los Djudios a los Kristianos esta persistiendo , por ke estan kontinuando a tener konversasyones I estan kontinuando a komunikar kon los Djudios, akeyos Djudios ke miran de toda manera de azer danyo I meter en duvda nuestra santa kreyensia Katolika, mirando de azer aleshar Kristyanos kreyentes de sus kreyensyas.
Estos Djudios embezan a estos Kristyanos sus seremoniyas I la observensya de sus Ley, azen sirkusir a sus kriaturas, les dan livros para ke orasyonen, les dizen kualos son los diyas de estar sin komer, I se enkontran kon eyos para embezarles los kuentos eskritos en sus Ley, les avizan kuando ya esta vinyendo el Pesah I komo lo van a observar, en dandoles de este pan sin levadura kon komidas ke preparan segun sus seremoniyas, I los embezan de kualo kale ke se akaviden, de lo kes defendido, seyga en kozas de komer, seyga en otras kozas ke son demandadas de ser observadas por la Ley de Moshe, todo en dandoles a entender ke no ay otra ley o verdad aparte de sus Ley.
Esto salyo enmedyo de la forma la mas klara de las konfesyones I atorgamientos de estos Djudios, I de akeyos ke fueron pervertidos I enganyados por eyos, I ke kavzo muncho danyo I tuvo una influensya muy mala sovre nuestra santa kreensia Katolika.I por ke ya saviyamos ke el verdadero remedyo para estos danyos I difikultades es el kortar I defender toda forma de kontakto I komunikasyon entre estos Djudios kon los Kristyanos, I en arondjandolos a eyos de todo lugar de nuestros reynados.
Juntos kon esto, mirimos de abastarmos en ordenando ke estos Djudios seygan arondjados solamente de todas las sivdades I kazales I lugares de la Andalusia ande se entendio ke ayi fue ke los Djudios izyeron el mas grande danyo, I kreyendo ke esto iva abastar para ke los Djudios de otras sivdades, kazales I lugares en nuestros reynados I teritorios se dezvacheyen de kometir los pekados ke dishimos. Ma porke fuimos informados ke ni esto, ni las justisyas ke fueron echas kon akeyos Djudios ke fueron topados muy kulpantes de estos krimenes I de arebashar nuestra santa kreyensia Katolika no sirvyeron a milizinar kompletamente , a empidir I a mejorear esta insulta I Ieste menazo a la kreyensia I a la Ley del Kristyanizmo; I porke todos los diyas esta salyendo en medyo ke estos Djudios aumentan I kontinuan sus malas intensiones I sus grande danyo en kada lugar ande moran I ande avlan, I porke ya no kedo mas danyo ke no izyeron a muestra santa kreyensia, seyga a los ke Dios los guadro asta agora I seyga entre akeyos ke fueron enganyados por estos Djudios, lo ke kedo de azer agora a esta Santa Madre Eglisia es de adovar I de amenguar el grande danyo I trayer las kozas a sus estado de antes, porke si esto no se aze, siendo ke komo humanos semos flakos I frajiles, podemos yegar fasilmente a kayer enfrente de esta tentativa diabolika de los Djudios, ke no kedan de gerreyar kontra mozotros.
Para esto kale ke la razon prinsipal despareska, lo ke kere dizir ke kale arondjado a estos dichos Djudios del Reynado. Porke kuando un krimen grave I desgustante es kometido por los miembros de un sierto grupo de personas, es razonavle ke este grupo seyga defendido I arrevatado, los chikos por los grandes seygan kastigados uno por el otro, I akeyos ke perverten, akeyos ke travan a malos kaminos a los buenos I a los onestos ke biven en las sivdades o en los kazales, I ke sus malisias seygan kontajiozas I agan danyo a otros, eyos deven ser aleshados I arondjados de entre la djente , mezmo si fueran razones menos graves, komo azer danyo al Estado, I no kere dicho por razones ke son krimenes muy grandes, danjerozos I kontajiozos komo los ke estamos viendo.
Por esta razon, kon el konsejo I propozisyon de personas eminentes I kavalyeros de nuestro Reynado, I de djente de saveduria I konsiensia de nuestro Konsilio Superior, despues de munchas deliberasyones, fue akseptado I fue tomada la desizyon ke todos los ombres Djudios I todas las mujeres Djudias seygan ordenados de salir I irsen de nuestro Reynado, I ke nunka seygan permitidos de boltar. Aparte de esto estamos ordenando por este dekreto ke todos los Djudios I las judias de kualkera edad ke moran en nuestro payis I en nuestros teritorios, ke se vaygan kon sus ijos I ijas, sus servidores I sus parientes, grandes I chikos, de toda edad, a la fin del mez de Julio este anyo, I ke no seygan permitidos de boltar a nuestras tierras, ni mezmo pizar o dar un paso sovre eyas de una manera o de otra.
Todo Djudio ke no se komportara segun este dekreto I ke se topara en nuestro Reynado I sus teritorios, o ke mirara deboltar al reynado en kualker forma sera kastigado por muerte I todo lo ke le apartiene le sera konfiskado. En desparte, estamos ordenando ke ninguna persona en nuestro reynado, sin emportansa de situasyon o de nobleza eskonda, guadre, defenda a algun Djudio o Djudia ni avyertamente ni en sekreto, desde la fin del mes de Julio, en sus kazas o kualker lugar de nuestro Reynado, I ke akeya persona sera kastigada de pedrer todo lo ke poseda, tierras, kastilyos, I privilegios de hereditad. Ansi ke ke los Djudios en kestion pueden disponer I azer lo ke keren de lo ke tienen en sus kazas I de lo ke les apartiene, en este tiempo ke les fue dado.
Agora les estamos asegurando la proteksion real I la seguridad para ke asta la fin de Julio eyos puedan vender o trokar los muebles o lo ke posedan I otras kozas, o disponer de sus bienes libremente segun eyos keren ; I ke en este tiempo ke les fue dado, ninguno es permitido de azerles a estos Djudios danyo, o injustisia o golpeyar a sus personas o a sus bienes, koza ke seria kontraryo a la djustisya, akeya persona meresera de ser kastigado komo akeyos ke azen danyo grande a la siguridad de nuestro reynado.
De esta forma les estamos permetyendo a los Djudios ombres komo mujeres, de tomar sus bienes afuera de nuestros reynados, seyga por mar o seyga por tierra, kon kondisyon ke no se yeven kon eyos nada de oro o de plata, o dinero o ninguna otra koza ke es defendida de yevar afuera segun las leyes del reynado.Ansi es ke estamos ordenando a todos los konsejeros, djuzgos, avokatos, kavalieros, portadores del eskudo, ofisiales, la buena djente de la sivdad de Burgos I de otras sivdades I kazales de nuestros reynados I sus teritorios, I a todos nuestros sivdadinos I djente de nuestra suditansa, ke observen I ke agan lo ke esta eskrito I kontenido en esta letra, I ke den todo sus ayudo I favor para ke lo ke esta ordenado seyga ekzekutido. Si no, eyos seran kastigados I apenados por la grasya soverena, I todos sus bienes I susfunksiones les seran konfiskados I seran apatronados por la kaza del estado real.I ansina esto deve vinir a la konosensia de todos, I ninguno podra pretender ke no savia o no sintio.
Estamos ordenando ke este dekreto seyga proclamado en todas las plasas I lugares de enkuentro en todas las sivdades, kazales I en todo lugar, I tambien enlas grandes sivdades I kazales de toda rejyon. Ke esto seyga echo por el apregonador de la sivdad en prezensya del enrejistrador publiko, I ke nada no seyga echo kontrariamente a lo ke esta ordenado, por pena de versen kastigados por la grasia soverana I de serles anulada toda funksion I ofisio, I la konfiskasyon de todos los bienes de los ke azen el kontrario.I de mas estamos ordenando ke la prova seyga trayida a la korte de la justisia, en forma de testimonio firmado onde sera dicho komo este dekreto fue aplikado.
Dado en esta sivdad de Granada en el primer dia de Marso, en el anyo de nuestro senyor Jesus-Kristo -1492.
Sinyado,YO el Rey YO la REYNA Juan de Coloma, sekretario del Rey I de la Reyna, ke lo eskrivi kon orden de nuestras Majestades.
Yo, Yohan de Coloma Secretario del Rey e de la Reyna Nuestros Seniores, la fize escrivir por su Mandado, Rejistrada Bernal Diaz Almacan, Kanchelario.

Tomado del libro de las "Bulas y Pragmáticas de los Reyes Católicos de Johan Ramirez - 1503".

Bruno Alcaraz Masáts

martes, 25 de noviembre de 2008

Ladino o Judeoespañol y Jaquetía:
Las hablas
de las Comunidades Sefardíes en España


El ladino o judeoespañol (djudeo-espanyol גודיאו-איספאנייול en ladino) es la variedad de español hablado durante siglos por los sefardíes, judíos expulsados de España en 1492. La denominación "judeoespañol", aunque reciente, es la más utilizada por los hablantes de esta lengua y este dialecto hablado por los descendientes de los sefardíes expulsados de España por los Reyes Católicos en 1492, como ocurre con las hablas hispanas de América de Sur, conservan palabras, términos y giros lingüísticos, que puede considerarse casi un equivalente del español peninsular del siglo XV y principios del XVI.

El castellano era común a las tres religiones que convivian en la península los sefardíes rehusaban por su cristianismo una serie de palabras, como Dios y Domingo, que serían sustituidas por El Dio y alhad, por influjo del árabe.

El Ladino, la lengua castellana hablada por las comunidades sefardíes en España, se extiende más allá de los territorios próximos a España, siendo también conocido como yudesmo o judezmo, español sefardí y judeoespañol y el Jaquetía -o Haketía- es la variación de la lengua castellana hablada por las comunidades sefardíes en España y el norte de Marruecos.

Su origen se encuentra en el castellano de finales del siglo XV, pero fue evolucionando con el paso de los siglos y conservó una gran vitalidad hasta el Holocausto, que vino a suponer el exterminio de muchos de sus hablantes y provocó el desplazamiento de muchos de los supervivientes.

En la actualidad, diversas instituciones de Israel están tratando de recuperar el uso de esta lengua y puede encontrarse vivo con gran frecuencia en los Balcanes, Oriente Medio, Marruecos y Turquía, las zonas de asentamientos de comunidades sefardíes aunque en fuerte decrecimiento en la actualidad.

Grupo Aman Aman

Si veriash a la rana / Las casas de la boda


Esta pajina es dedikada a los ke se interesan
a la kultura djudeo-espanyola i dezean
anchear sus konosensias en este kampo o ser aktivos
eyos mizmos en los esforsos para su konservasion i difuzion.

La pronunciación coincide, aproximadamente, con la que establece Antonio de Nebrija en su Gramática, y se caracteriza por la conservación, aspiración o desaparición de f inicial, según la zona originaria de procedencia, la distinción de las consonantes fricativas alveolares y palatales en sordas y sonoras (s/z, S/Z), etc.

Morfológicamente, se distingue por las desinencias verbales –ís por –éis, en el presente de indicativo y por la conservación de los pronombres indefinidos naide y tal. Además, el vocabulario de cada comunidad está fuertemente penetrado de elementos adquiridos por las lenguas oficiales con que conviven, así como de italianismos, arabismos y hebraísmos.”

“El judeo-español es la lengua materna de los sefardíes o sefaradíes (La palabra viene de Sefarad, el nombre hebreo para España), judíos españoles y sus descendientes. Como todo el mundo sabe, el año 1492 es señalado no sólo por el gran descubrimiento del Nuevo Mundo, la colaboración de la primera gramática de la lengua castellana, sino también por el acto anti-semitista de los Reyes Católicos: la expulsión de España de los judíos non-conversos al cristianismo.

Estos judíos desterrados fueron acogidos principalmente por tres países: un país cristiano, Portugal y dos países islámicos, Marruecos y Turquía. Pero en 1497 la Corona Portuguesa decretó “o bautismo o expulsión” siguiendo el ejemplo de España. Muchos de estos judíos español-lusitanos se trasladaron a Inglaterra, Bohemia, algunos estados italianos y sobre todo los Países Bajos. Y con la expansión de la colonización, algunos sefardíes llegaron incluso al Nuevo Mundo. Así es que hasta hoy los sefardíes se dispersan por todo el mundo, su distribución geográfica abarca cuatro continentes: Europa, África, Asia y América.

Los judíos españoles habían escrito en lengua castellana desde que hubo literatura. Los redactores de buena parte de la prosa de Alfonso X el Sabio, fueron judíos. El autor de La Celestina, Fernando de Rojas, fue un judío. Pero el lenguaje de los judíos españoles, aún desde la Edad Media, tenía peculiaridades atribuibles al carácter restringido de su comunidad, por motivos religiosos y tradición hebrea. El judeo-español en la literatura, sobre todo, en las versiones bíblicas, se diferencia del judeo-español en el habla en que es un lenguaje híbrido de español y hebreo. Este lenguje artificioso recibe la designación de “ladino” mientras que “el judesmo” se refiere al judeo-español de uso general.

La característica más notable del judeo-español es su extraordinario arcaísmo tanto en el sistema fonológico como en las formas gramaticales.

Una posible causa consiste en que la diáspora de los judíos hispanos comenzó con la matanza de 1391, un siglo antes de la expulsión, y por eso el judeo-español no participó en las principales transformaciones del castellano en el norte de la Península, que ocurrieron hacia 1400, sin embargo, acogió otras transformaciones en el Sur de España, por ejemplo, comparte el seseo-çeçeo y el yeísmo con el español andaluz y su expansión atlántica. Una muestra del arcaísmo del judeo-español es que, por ejemplo, se desconocen vuestra merced y usted. Para tratamiento de respeto se usan vos en Marruecos y él, eya en Oriente.

El judeo-español también ha sufrido influencias de los dialectos de España. En su vocabulario existen muchas palabras de origen dialectal, por ejemplo, ainda(aún) de gallego, lonso (oso) de aragonés, samarada (llamarada) de leonés, y anozar (enojar) de portugués. El judeo-español también tiene inovaciones. El del norte de África ha recibido influencia del árabe y el español moderno, el del Oriente abunda en palabras griegas, turcas e incluso eslavas. Además, la expresión culta muestra gran abundancia de galicismos e italianismos.

Como una variedad de la lengua castellana, el judeo-español es muy importante por haber conservado muchas características arcaicas que han desaparecido del español moderno, y también por su inevitable destino de decadencia debido a la asimilación y la mezcla con diferentes culturas.”

Bruno Alcaraz Masáts

Artículo publicado en el El Diario de la Diáspora - Revista Sefaradí de Béjar, en el nº 359 - 25 de Noviembre de 2004.


lunes, 24 de noviembre de 2008

El Pogrom de Granada de 1066

Una menorah (מנורה) y la colina del Mauror, en Granada

Texto de la casida ''Diatriba'' del poeta
y alfaquí Abu-Ishaq, que desató la matanza


Foto del Valle del Genil, el Mauror y la Antequeruela

(Un pogrom (término procedente del ruso погром o «devastación») consiste en la ''devastación'' por asalto en masa a un arrabal y el linchaminento espontáneo o premeditado de un grupo étnico o religioso, que suele ir acompañado del expolio y la destrucción de sus bienes (casas, tiendas o edificios religiosos) y de la muerte de la mayoría de sus habitantes, aunque históricamente el término ha sido usado para definir los actos de violencia indiscriminada, sean espontáneos o premeditados, contra los hebreos o judíos en Europa.)


En el siglo X era tan numeroso el asentamiento de los judíos en Granada que el cronista Abū Bakr Muhammad ibn Zakarīyā al-Rāzī (ابو بکر محمد بن زكريا الرازی), al-Razi (865-928) llamó a la ciudad Garnata al-Yahud, ''la Granada de los judíos''.
Los árabes llamaron en sus crónicas y escritos de la época a este lugar Garnat Al-Yahud o Granada de los Judíos (اليهود) durante mas de 80 años , a partir del año 711.

"Esta ciudad es Garnata o Agranata, nombre extraño a la lengua árabe", según cita el polígrafo Lisan al-Din ibn al-Jatib (لسان الدين بن الخطيب) Muhammad ibn Abd Allah ibn Said ibn Ali ibn Ahmad al-Salmani Ibn al- Jatib (1313-1373).

Era un asentamiento judío llamado Garnatat, que habitaban próximo a las orillas del Darro, en la colina del Mauror, coronada por las Torres Bermejas, antes de la llegada de los árabes y que facilitó a éstos la conquista del lugar. Los árabes la llamaron al principio Garnatat Al-Yahud (Granada de los judíos). A la
llegada de los árabes existían 3 pequeñas poblaciones:


La colina del Mauror o loma de Albahul,
era la antigua judería de los hebreos,
establecida en este arrabal de Granada
Iliberis (Elvira) en el Albayzín y Alcazaba.
Castilia, cerca del actual pueblo de Atarfe.
Gharnatat, en la colina, frente a la Alcazaba,
que era un arrabal de Iliberis.

Granada es un término cuya acepción en hebreo es "ger-anat": ''campo de refugiados". La ciudad surgió como suburbio de Elvira, y en el se instalarían los judíos escapados de las guerras de Roma, cuando se iniciara esa primera diáspora por Europa tras la segunda destrucción del templo de Salomón, en el año 70, durante la Gran Revuelta Judía. Cuando llegaron los musulmanes en el 711, la llamaron "Garnata al -Yahud" en sus textos.

Julio Caro Baroja, cuando se refiere al origen de Granada, dice:
''Tan fuerte era el elemento hebraico en la Granada medieval... que fue ciudad de fundación judía. Esto puede referirse a la población que sustituyó en importancia a la vieja Iliberis, porque de ella sabemos que había tantos judíos que en el Concilio de Elvira se legisló muy especialmente para ellos, y esto en el Siglo IV".
David Gonzalo Maeso, indicó sobre ella:
''En la Granada de 1.050 había 15.000 familias de judíos. Los judíos de Granada se reunieron en su alfama, otorgando a favor del Concejo el derecho del campo y cementerio de la mencionada judería, que llamaban judemendi, para que sirviese de pasto y dehesa común, prometiendo el Conçejo que, en aquel campo y su término, nunca se rompería ni araría''.
La Granada nazarita tuvo dos visires judíos, Samuel Ibn Nagrela y su hijo Jose, que adoptó el nombre árabe de Yusuf, que protegieron a la comunidad judía, y que ambos murieron asesinados entre 1056 y 1066.
Su muerte en los palacios de la Alhambra estuvo unida a la aniquilación de la población judía de Granada por los hispano-musulmanes. Se calcula que hasta cinco mil judíos perecieron en el pogrom hispano-musulmán de 1066 que acompañó al asesinato de los dos visires judíos de la corte nazarita.
En general los judíos se consideraron como propiedad personal de los reyes, califas o emires, lo que les permitía cierta independencia y privilegio de trato, pero a la vez recelos encontrados, muchos de los cuales estallaron en los pogroms de 1013 en Córdoba y en 1066 en Granada o en 1391 en los reinos cristianos, hasta la definitiva expulsión en 1492.
Esa cifra iguala o supera a la de judíos presuntamente asesinados por los cruzados en su pillaje de la Renania unos treinta años después, al comienzo de la Primera Cruzada. Es probable que al pogrom de Granada incitara, entre otras cosas, la acerba oda antijudía de Ibrahím ben Mosud, llamado Abu Ishaq al-Ilbiri (es decir, ''el de Elvira''), célebre jurista y poeta musulmán de la época, que había escrito un impresionante poema de odio antisemítico, ante el rumor que corría por la ciudad del asesinato sobre el rey Badis en la Alhambra por José Ibn Nagrela.
La ciudad clamaba venganza, culpando a los judios de Granada y, tras la lectura de la ''Diatriba'' de Abu-Ishaq, el 30 de Diciembre de 1066 fueron perseguidos como alimañas, siendo asesinados, degollados o ahogados por humo, en la razzia de fuego y sangre que se inició esa noche en la ciudad.
El rey Badis fallecería 7 años después, en 1073, sin haber podido evitar, en su momento, la ira antisemita de Abu-Ishaq y sus conscuencias sobre la judería de Granada.
Texto de la casida ''Diatriba'' de Abu-Isaq

"Lleva, mensajero, a todos los sinhaya, lunas llenas y leones de nuestro tiempo, estas palabras de un hombre que los estima y que creería faltar a sus deberes religiosos si no les diera saludables consejos.
Vuestro señor ha cometido un yerro, del que los malévolos se regocijan: pudiendo elegir su secretario entre los creyentes, lo ha tomado entre los infieles. Gracias a este secretario, los judíos, desde el fondo de su vilipendio se han convertido en grandes señores, hasta el extremo de que ya en orgullo y arrogancia rebasan todo limite.
De la noche a la mañana y sin sospecharlo siquiera, han conseguido cuanto pudieran apetecer; han llegado al ápice de los honores, de manera que el mono más vil de esos infieles cuenta hoy entre sus dores una muchedumbre de piadosos y devotos musulmanes. Y todo eso no lo deben a su propio esfuerzo, no; ¡el que los ha encumbrado tan alto es un hombre de nuestra religión!
Ah! ¿Por qué ese hombre no sigue a su respecto el ejemplo que dieron los príncipes buenos y devotos de antaño?¿Por qué no los vuelve a su puesto? ¿Por qué no los convierte en los más viles de mortales?
Entonces, yendo en tropel, llevarían en medio de nosotros una vida errante, a merced de nuestro desdén y nuestro desprecio; entonces no tratarían a nuestros nobles con altivez, ni a nuestros santos con arrogancia gancia; entonces, no se sentarían a nuestro lado esos hombres de raza impura, ni cabalgarían al lado de nuestros grandes señores de la corte! ¡Oh Badis! Tú eres un hombre de gran sagacidad y tus conjeturas equivalen a la certeza:
¿Cómo es posible que no te percates del mal que hacen esos diablos cuyos cuernos se manifiestan por doquier en tus dominios? ¿Cómo puedes profesar afecto a esos bastardos que te han hecho odioso ante el género humano? ¿Con qué derecho esperas afianzar tu poder, cuando esas gentes destruyen lo que tú edificas? ¿Cómo puedes otorgar una confianza tan ciega a un malvado, y hacer de él tu íntimo amigo?
¿Has olvidado que el Omnipotente dice en el Libro que no hay que trabar amistad con los malvados? No tomes, pues, a tales hombres como ministros; abandónalos a las maldiciones, pues toda la tierra clama contra ellos; ¡pronto temblará y entonces todos pereceremos! Dirige tus miradas hacia otros países y verás que en todas partes se trata a los judíos como perros y se les da de lado.
¿Por qué has de ser tú el único en obrar de otra manera, tú que eres un príncipe amado de tus pueblos, tú que procedes de ilustre estirpe de reyes, tú que aventajas a tus contemporáneos, como tus antepasados aventajaron a los suyos?
Llegado a Granada vi que allí señoreaban los judíos. Se habían repartido la capital y provincias; en todas partes mandaba uno de esos malditos. Ellos recaudaban las contribuciones, comían opíparamente, vestían con todo lujo, en tanto que vuestra indumentaria estaba vieja y deteriorada. Todos los secretos del Estado les eran conocidos: ¡qué imprudencia confiarlos a traidores! Los creyentes malcomían a razón de un dirham por cabeza; ellos, en cambio, banqueteaban suntuosamente en palacio.
Os han suplantado en el favor de vuestro soberano, ¡oh musulmanes! ¿Y vosotros no los recusáis, les dejáis hacer? Sus oraciones resuenan igual que las vuestras: ¿no lo oís, no lo veis? Sacrifican bueyes y carneros en vuestros mercados y ¡vosotros coméis la carne que para ellos mismos es inmunda! El jefe de esos monos ha enriquecido su morada con incrustaciones de mármol; ha hecho correr fuentes donde corre el agua más cristalina y en tanto que nos hace esperar a su puerta, se mofa de nosotros y de nuestra religión.
¡Oh, Dios, qué desventura! Si dijera que es tan rico como tú, ¡oh rey!, diría la verdad. ¡Ah! Apresúrate a degollarlo y a ofrecerlo en holocausto; sacrifícale; es un carnero cebón. No perdones a sus parientes y allegados. También ellos han reunido inmensos tesoros. Toma su dinero. Tú tienes más derecho que ellos.
No creas que sea una perfidia matarlos, no; la verdadera perfidia sería dejarles reinar. Han quebrantado el pacto que habían estipulado con nosotros; ¿quién se atrevería, pues, a recriminarte por castigar a perjuros? ¿Cómo podríamos nosotros aspirar a distinguimos, viviendo en la oscuridad, cuando los judíos nos deslumbran con el brillo de sus grandezas? Comparados con ellos somos objeto de vilipendio, y diríase en verdad que nosotros somos unos malvados y que esos hombres son gente honorable.
No consientas por más tiempo que nos traten como hasta ahora vienen haciendo, pues tú nos responderás de su conducta.
Recuerda que tú también un día tendrás que dar cuenta al Eterno sobre la manera como hayas tratado al pueblo que El eligió y que ha de gozar de la eterna bienaventuranza."


Bruno Alcaraz Masáts